jueves, 28 de febrero de 2008

REFLEXIONES EN FRÍO


Por José Antonio Rivas

Ahora que ha pasado casi un mes desde la finalización del concurso, me gustaría hacer una valoración en profundidad y con una perspectiva más lejana del mismo y de todas las novedades que ha sufrido este año. Y lo hago en estas fechas intencionadamente, con todo mi respeto para la cuaresma y todo lo que conlleva. Pero sería en estos días cuando tendríamos que estar celebrando el carnaval cada año y no depender de otros factores. Seamos serios señores, es nuestra fiesta grande, por la que es conocida la ciudad y de interés turístico internacional (o por lo menos eso pone en los carteles), no puede depender de nada, tiene que tener su fecha fija, unos días al año en el que la gente identifique que son días de carnaval. Y no sólo para el público sino para las agrupaciones; no es normal que tengan que ir a cantar con cuatro polvorones atragantados. Es un tema espinoso, que seguiré tratando y que espero que se modifique en no mucho tiempo, porque le daría a nuestro carnaval un mayor prestigio y una mayor trascendencia. Pero vamos con el concurso que es el tema de esta columna.

Mejor comenzar con lo que considero los puntos positivos. El primero creo que es la fase de Cuartos de Final, pero eso sí, con matices. Bajo mi punto de vista es una iniciativa positiva y que la dinámica del concurso pedía a gritos, hay grupos que dan un buen primer pase, pegan, y gustan inesperadamente, pero que luego se les hace muy larga la competición y no tienen repertorio para dos pases de Semifinales. En ese sentido es perfecto, porque esas agrupaciones tienen el justo premio de cantar una vez más, pero se les ahorra, a ellos un segundo para cuanto menos discreto, y a los aficionados no se les martillea con un grupo que no tiene calidad para cantar tres veces en el Falla. Hasta ahí bien, pero creo que el sistema todavía puede ser mejorable. Soy partidario de ensanchar un poco el corte para la Semifinal. Hay grupos, sobretodo los más jóvenes que vienen empujando desde abajo, que sí tienen calidad para cantar tres veces, y además eso les serviría para curtirse en el teatro, pero a igualdad de condiciones es inevitable que pesen los nombres. En este sentido creo que a ese tipo de agrupaciones se les debería otorgar esa especie de premio, entre comillas, de actuar un día más. Un claro ejemplo de esto que digo es la comparsa “La escuela de Carnaval”. Gente joven, que están subiendo como la espuma desde la cantera, que tienen cosas que decir, y que por este sistema se les ha privado de un tercer pase. Todo es mejorable, está claro.

Como aspecto positivo también quiero destacar el nivel general en el concurso de este año, una gran competitividad, y sobretodo la subida bajo mi punto de vista de comparsas, cuartetos y coros. Quizás las chirigotas han estado un poco por debajo del nivel general, salvo casos contados claro está. También me alegro del regreso de grupos anteriores, como el de Bienvenido que ha aportado mucha frescura, o la creación de grupos nuevos, como “La comparsa de Momo”, “La calle del arte”, o “Los proscritos de la Viña”, entre otros.

Vamos con lo menos bueno, o en este primer aspecto con lo malo, malísimo, nefasto. La final. En primer lugar es incomprensible que haya preliminares más extensas o iguales que la propia final, eso no es de recibo. Y eso de acortar la final, con sólo tres grupos máximo por modalidad es la peor medida que se ha adoptado en años. Reduzcan el tiempo de montaje entre agrupación y agrupación, no permitan que el ritmo de la misma esté teledirigido por la televisión, hay mil maneras de acortar la final en cuanto a tiempo, para que no acabe a las y pico, pero no quiten grupos, dejen disfrutar a los aficionados de una noche especial de coplas. ¿A quién le parece larga la final? ¿Se a planteado alguien reducir la madrugá en Semana Santa porque resulta larga? Nadie lo ha hecho, nadie se atrevería. A quien le parece larga simplemente se va a su casa y se acuesta, igual que ocurre en un partido de fútbol, un concierto, una película o cualquier espectáculo. Pues hagan lo mismo, la gente que tenga sueño, se aburra o no le guste, que se acueste cuando guste, a nadie se le obliga a estar en el teatro o delante de la tele, o pegado a la radio hasta el final. Algo que ha funcionado siempre no hay porqué cambiarlo.

Tampoco ha salido muy bien eso de comprimir en cuanto a días y meter más grupos en la fase preliminar. Pero bueno eso es algo forma parte de la solución de emergencia para este año que supongo que será eliminado el próximo carnaval. A pesar de ello es la fase que más me gusta del concurso, y que no la toquen aunque algunos oportunistas pretendan eliminarla con fases previas fuera del Falla y demás tonterías.

En general la prontitud de las fechas les ha cogido algo a contrapié a todos, y el tema organizativo ha dejado bastante que desear. En el debe del concurso hay que poner el sistema de entradas, muchos días con un aspecto muy pobre en el Falla y mucha gente quedándose fuera. Es verdad que se ha acabado con la reventa pero ¿a qué precio? En los últimos días parece que la fórmula estaba más rodada y la gente se había ido adaptando, pero es algo que traerá algún que otro quebradero de cabeza el año que viene. Lo más inmediato: conseguir una empresa fiable y capaz de abastecer toda la demanda de entradas.

Para acabar con lo negativo, algo más particular pero también meritorio de ser reseñado. Digo particular porque afecta a los medios de comunicación. Primero lo de la nueva sala de prensa no ha sido precisamente un acierto, ha sido un caos y un desorden absoluto. Luego el tema de la famosa línea para los inalámbricos de las diferentes emisoras es absurdo, toda la vida se ha trabajado ahí y nunca ha pasado nada, y todavía este año había personal que trabajaba y “colaos” que veían las actuaciones sin casco, que ahora parece ser tan fundamental. Por último algo para el futuro, no es de recibo la forma en la que tenemos que trabajar en la final, compartiendo palco, cual sardinas enlatadas, con compañeros de otra emisora. No creo que se pierda tanto dinero por dejar de vender dos palcos. Y si es verdad que se pierde, que se lo quiten al protocolo de gente innecesaria, y no a la gente que estamos trabajando.

Algo se me habrá pasado por alto, pero hay mucho tiempo para seguir hablando. De momento me he quedado a gusto diciendo todo lo que pensaba. Espero que se mantengan las cosas buenas y se corrijan las malas. Al fin y al cabo esto es carnaval, y aquí no pasa ná, esto es un cachondeo.

2 comentarios:

embarcadero dijo...

Buenas “Reflexiones en frio” que es cuando se analizan bien las cosas. Hay que reconocer que los Carnavales en fecha como la que hemos tenido este año es una autentica locura y lo malo es que volverá a ocurrir. Totalmente de acuerdo que algo habría que hacer y una fecha fija podría ser la solución; aunque la tendencia sea conservar las tradiciones en casos extremos como los vividos en un calendario tan apretado se podría ser más benevolente. Cádiz es un caso aparte, porque aquí disfrutamos de un concurso que debemos cuidar, que cada vez tiene más participación y más afición.

Valoro positivamente la fase de Cuartos de Final, es cierto que ha sido una iniciativa positiva. Referente a la Final del Concurso a mi particularmente no se me hace larga, no ha sido buena la medida de tres agrupaciones máximo por modalidad, pero si quitaría el acto de entrega de los antifaces de oro, trasladándolo al inicio del primer día del concurso, incluso los galardonados disfrutarían más y no romperían la dinámica de la Final.

Los medios de comunicación son los que nos hacen llegar a nuestra casa la imagen, el sonido y toda la información del concurso, muchas horas de trabajo para que los aficionados al Carnaval disfrutemos y no perdamos detalle del mismo, por eso hay que facilitarles su labor para que puedan realizar cómodamente su trabajo y no crearles complicaciones como las que comentas o cambiarlos de sitio en pleno concurso con los problemas técnicos que ello conlleva.

José Antonio, buena idea el habernos brindado las coplas por Andalucía. Un tema también a debatir podría ser las puntuaciones del jurado, como por ejemplo valorar más las letras inéditas en la final, saludos de Peralta.

Anónimo dijo...

Muchas gracias por toda la información y reflexiones que has compartido en tu blog.
Junto con la información que he podido encontrar en Trivago, en cuanto a fotos y opiniones... me han decidido a acudir sin dudarlo el año que viene al carnaval.
Gracias.